El Centro Cultural San Jorge, construido en 1970, es uno de los edificios más emblemáticos del municipio de El Burgo de Ebro debido a su importancia dentro del servicio educativo municipal. Desde entonces ha sufrido varias reformas para su renovación, adecuación y mejora de la accesibilidad: se construyó una nave multiusos adosada y se realizó la conexión de ambos volúmenes a través de una pieza de servicios, con aseos, almacenes y un ascensor exterior. Actualmente está destinado para actividades de formación para adultos y tercera edad, así como para albergar eventos y festejos municipales en la sala multiusos. Con estas dos ampliaciones resulta un conjunto de dos volúmenes principales, unas dependencias auxiliares de conexión, una zona de servicios, un pequeño patio y la caja del ascensor.

El proyecto busca actualizar las fachadas y cubierta solventando los problemas de filtraciones existentes, mejorando el comportamiento energético de la envolvente del edificio original, y dignificando el acceso secundario a la sala multiusos.

La intervención consta de la proyección de un SATE (sistema de aislamiento térmico exterior) con tres acabados diferentes en fachada que alberga el cableado eléctrico, un revestimiento metálico en los dos accesos que integra la cartelería, la retroiluminación y las cancelas; y una renovación de la cubierta con teja mixta cerámica sobre rastreles de madera con aislamiento en la cámara no habitable. Con las intervenciones de SATE en fachadas y el aislamiento en cubierta, se consigue una reducción del consumo de energía primaria no renovable, así como una disminución de las emisiones de dióxido de carbono anuales.

La adecuación del acceso secundario a la sala multiusos se ha realizado mediante la sustitución de la cubierta por una nueva de policarbonato sobre correas metálicas y un falso techo de chapa tipo deployé, que permite la entrada de luz diurna y oculta las instalaciones de aire acondicionado existentes. Además, se realiza un cambio de carpinterías y un pintado de la envolvente interior.

Se eligen los colores gris y blanco para unificar estéticamente el exterior del edificio con la reforma interior realizada en 2020: renovación de pavimentos, aseos, pinturas, etc.

Compositivamente, se busca mantener la verticalidad de la fachada y el zócalo existente, evitando distorsionar la identidad original del edificio.